sábado, 24 de octubre de 2015

Capítulo 22.

   Son casi las dos de la mañana, pero por el momento, ninguno tiene intención de poner fin a la fiesta. Busca a su amigo con la mirada, pero no consigue encontrarle. Lleva más de media hora sin verle y empieza a preocuparse.
-¡Rox!
   Se gira y sorprendida, sonríe. No esperaba encontrarse con Brandon allí, pero se alegra de verle. Le saluda con un pequeño abrazo.
-¿Qué haces aquí? No esperaba ver a alguien del instituto.
-Celebro que han empezado las vacaciones. He venido con unos amigos, ya he visto a los demás, has venido con ellos, ¿no?
-Sí... Me alegro de verte, Brandon.
-Luego nos vemos.- Se despide y se aleja para ir con unos chicos.
   Ella por su parte, sigue con la tarea de buscar al chico, aunque esta vez, decide moverse por el local. Los minutos pasan y tras varios encontronazos con gente en malas condiciones, consigue verle.
-¡Alexy!- Se acerca hasta él y se fija en el chico que le acompaña.- ¿Interrumpo algo?
-No, tranquila. Te presento, él es Elliot.
-Encantada, me llamo Rox.- Sonríe amable.- Te estaba buscando, como te fuiste sin decir nada...
-Me encontré con él y se me ha pasado el tiempo.- Se justifica algo sonrojado.- ¿Y los demás?
-No lo sé, pero tu hermano y David no están como para dejarles solos...- Suspira.- Y creo que Rosa, tampoco está muy allá.
-No me jodas... Elliot, lo siento. Pero alguien tiene que cuidar del imbécil de mi hermano.- Se disculpa con el chico.
-¿Te acompaño?
-¿No te importa? Que has venido con más gente...
-Claro que no, les aviso y ahora voy.- El chico sonríe.
-Rox, ¿te importaría esperarle?
-Me quedo aquí, tranquilo.
-Gracias.- Elliot se aleja y la chica mira a su amigo con complicidad. Éste sigue siendo un tomate y eso hace que se ría.
-Bueno... ¿Quién es?
-Un amigo.
-Un amigo. Ya, seguro. Pues creo que por cómo estás reaccionando, no es un simple amigo.
-Nos estamos conociendo...- Alexy se ríe.- Bueno, voy a ver cómo está Albert, te veo ahora.
   El rubio se marcha de allí dejándola sola. Rox suspira y se apoya sobre la barra. Cruza los brazos y mira el panorama que hay en ese local a estas horas. Gente animada bailando, bebiendo... Gente que apenas se mantiene en pie...
-¿Qué haces aquí?- Max se acerca hasta ella y le mira curioso.
-Espero a un amigo de Alexy...
-¿Alexy tiene novio?
-No, sólo se están conociendo, aunque no me lo termino de creer, pero bueno.
-Yo tampoco me lo creería. Luke ha tenido que sacar a Rosalya de aquí. Empezaba a encontrarse mal.
-A este paso, David y Albert acabarán como ella.
-No te preocupes, un escarmiento no les viene mal.
-Ya estoy.- Elliot se acerca entre la multitud.
-Él es Max, también está con nosotros.
-Soy Elliot, encantado.- Estrechan la mano.- Siento haberos hecho esperar.
-No te preocupes.- Max sonríe.- Estamos en los reservados del fondo.
-¿En los reservados? Qué bien os lo montáis...
-Hay que tener contactos...- Rox camina por delante de ellos.- Ahí está Alexy. ¡Monroe!- Eleva la voz haciendo que el rubio se ría al escuchar su apellido.- Os dejamos, ¡luego nos vemos!- La morena de ojos verdes coge a Max de la mano para alejarse de allí y dejarles a solas.
-¿Cómo está tu hermano?
-Le están cuidando bien.- Sonríe al recordar que Aisha se había quedado con él.- Bueno, creo que tú y yo, tenemos que retomar una conversación, ¿no?



   Algo más despierto, consigue ponerse en pie de aquel sofá. Para su sorpresa, no se tambalea y da unos cuantos pasos para salir del reservado.
-Eh, ¿se puede saber qué haces?- Dinna se acerca hasta David y le mira preocupada.
-Quiero ir al baño, tengo ganas de hacer pis, ¿sabes?
-Te acompaño. No me fío de que llegues por tu cuenta.
-En realidad, quieres entrar conmigo y lo sabes.
-Ya te gustaría a ti, pero sabes que a mi en los sitios públicos... Como que no.
   Suelta una carcajada al escuchar aquello. Ella como siempre, siendo tan directa y dándole el corte en esas situaciones.
-Deberíamos probarlo algún día. Lo mismo te gusta.
-Calla.- Dinna le da un cálido beso y sonríe tras ello.- Venga, vamos.
   La pareja abandona el reservado y con cierta dificultad, consiguen llegar hasta la zona en la que están los servicios. Hay una larga cola para poder entrar y saben que les va a llevar un buen rato estar allí.
-Sería más fácil salir a la calle e irme tras un contenedor de basura.
-David...- La pelirroja se ríe al escuchar eso.- No seas así.
-Es la verdad, ¿has visto la cantidad de gente que espera para entrar?
-No seas tan quejica.- La chica mira por el interior del local esperando encontrar a alguno de sus amigos
-¡Chicos!- Nyx se abre paso entre la gente, consiguiendo llegar a ellos.- Nos vamos a casa.
-¿Tan pronto?
-David, son las cinco de la mañana... Y además, llevamos a dos individuos borrachos.
-A mi se me está pasando, eh,
-No lo digo por ti, lo digo por Albert y por Max. Se la han pillado buena...- Suspira.- En fin, ¿vamos?
-Yo quería entrar al servicio.- El moreno bosteza sin querer.- Perdón.
-No importa. Tío, ¿por qué no te vas a la calle? Yo lo he hecho antes sin necesidad de esperar la cola que hay.
-¡Te lo dije!- David mira a su novia con diversión.- Bueno, pues vamos a por las cosas y salimos.
   Nyx les acompaña hasta el reservado, donde Rosalya y Luke están recogiendo. Todos se ponen los abrigos y abandonan el local con la esperanza de no tardar mucho en volver. Realmente, han pasado muy buena noche.
   Una vez en la calle, consiguen ver a los demás. Han formado un corro alrededor del banco que han ocupado Max, Albert y Alexy. Éste último aprovechando la situación y el estado tan lamentable que llevan esos dos, les vacila todo lo que quiere y más.
-Soy alguno de ellos y te soltaba un guantazo.- Nyx le mira seria.- ¿No te dan pena? ¡No se pueden defender!
-¡Oye! Que luego ellos bien que se meten con nosotros.- El rubio alza las manos intentado aparentar inocencia, cosa que desde luego no tiene.- Bueno, que nos vamos a casa.
-¿A casa? ¿Por quééééééé?- Max hace pucheros y niega con la cabeza.- Yo no me quiero ir a casa.
-Pues te tienes que ir, quieras o no quieras.- Rox le ayuda a levantarse y resopla al ver que opone resistencia y que pretende volver a sentarse.- Joder, Max. ¡Que pesas mucho!
-¿Me estás llamando gordo? Tío, me acaba de llamar gordo. ¡Estoy gordito!- El joven mira a su mejor amigo, quien se ríe ante aquella escena.- Soy un globo.
-Madre mía... ¿Y le vas a llevar tú solo hasta su casa?- Aisha mira a Luke sorprendida.
-Ni de broma, le llevo a mi casa que Dianne no está para disgustos. Venga tú, señor globo, vamos al coche.
-¿Quieres que vaya con vosotros?- Rosalya mira a su novio, que ahora sujeta a su amigo.
-No, tranquila. Cuando llegue te mando un mensaje y listo.
-David, tío. Ayuda. Que es tu mejor amigo.
-También es tu hermano.- El joven se ríe al ver que Alexy resopla.- Albert, no te duermas.
-Yo... Quiero... Quiero... ¿Por qué se mueve todo?.- El gemelo de pelo oscuro arrastra las palabras.- ¿Por qué caminamos?
-Porque nos vamos al coche y nos vamos a casa.- Alexy saca las llaves del Citroen.
   El resto el grupo les sigue a todos, hasta que llegan al coche de Luke y llega el momento de despedirse.
-Bueno chicos, nos vemos a la vuelta. Ya iremos hablando.- El castaño mete a su amigo en el coche y cierra la puerta.- Me llevo al globo.
-¡Pero no me cierres! ¡Que no me he despedido de la novata!
-Adiós Max, adiós...- Rox suelta una carcajada.- Que pases buenas vacaciones y una buena noche.
-¡Pero dame un beso!
-Uno no, dos.
-¡Vale, venga!
   La chica niega con la cabeza y al igual que los demás, se alejan de allí para acompañar a los gemelos y a David hasta el coche.
   Última salida del año que han hecho en grupo.



   Abre los ojos con dificultad y mira la hora del reloj que tiene en el escritorio. Resopla y se reincorpora. Son las diez de la mañana y no hace ni cuatro horas que llegaron a casa tras la fiesta. Se pone en pie y sale de su habitación. Baja las escaleras y entra en la cocina para beber un vaso de agua, seguido de varios más.
-¿Te parece normal? ¡Te falta beber el agua de los floreros!- Su madre se apoya en la puerta y le mira seria.
-No grites, por favor...- Suspira.
-¿Que no grite? Qué desastre, siempre te pasa lo mismo. ¡Tienes que controlar lo que bebes! Menuda resaca debes de tener, anda. Haz el favor de desayunar y tomarte algo.- La mujer se cruza de brazos con cara de pocos amigos, aunque realmente está preocupada de ver a su hijo así.
-No tengo ganas de comer... Me vuelvo a la cama.- Rellena una botella de agua y pasa junto a la mujer.- Te quiero.- Le da un beso en la mejilla y sonríe intentando relajar el ambiente.
-Albert, haz el favor de tomarte algo.
-Más tarde mamá...- Sube las escaleras y al llegar arriba, ve que su hermano sale del cuarto de baño.
-Bebí dos copas. Tenía que conducir.
-Si no te he dicho nada.- Se ríe.- ¿Has devuelto?
-Sí.- Alexy suspira.- Me vuelvo a la cama. No he dormido nada.
-Lo mismo digo. A sobar, hasta luego.- Entra en su habitación, cierra la puerta y baja las persianas para tirarse sobre la cama. Se tapa con la colcha y resopla. Realmente, se encuentra muy mal. Le duele todo el cuerpo y tiene la constante sensación de estar mareado. Odia las resacas, pero nunca aprende la lección y siempre le pasa lo mismo.
   Su móvil se ilumina y curioso, mira la pantalla. Es un mensaje. Lo desbloquea y sonríe al ver que se trata de Aisha. Se lo mandó poco después de que se despidieran, pero hasta ahora, no se había dado cuenta de ello. Cegado por el brillo del móvil, intenta adaptarse para poder leerlo.

"Espero que puedas descansar, háblame cuando puedas feo. Por cierto, me quedé con algo tuyo, ya te lo devolveré."

   Bosteza y rápidamente responde.

"Me he desvelado, pero me vuelvo a dormir... Luego te llamo, enana. Posdata: tendremos que vernos si me lo quieres devolver..."

   Lo envía y deja el móvil sobre el escritorio. Cierra los ojos y da media vuelta acomodándose en el colchón. Intenta hacer memoria de lo que pudo hacer en el local, pero solo recuerda algunas cosas sueltas y pensar demasiado, le da más dolor de cabeza del que ya tiene.
   A punto de volver a quedarse dormido, un vago recuerdo le llega a la mente. Aisha no le dejó solo en ningún momento. Se ocupó de él, se preocupó de su estado, se rió de las tonterías que no dejó de decir... Al recordar aquello sonríe, haciendo que esa sonrisa se quede en su rostro cuando consigue conciliar el sueño al final.

sábado, 17 de octubre de 2015

Capítulo 21.

   Ensayan la última canción de la tarde. Es una nueva que han incluido en el repertorio, a petición de Dinna, Aisha y las otras tres chicas que componen el grupo de amigos. No es el estilo que suelen utilizar normalmente, pero por variar un poco... No pasa nada.
-Call it a curse, or just call me blassed. If you can't handle my worts, you ain't getting my best...- Canta Aisha acompañada del piano.
-If this how Marilyn Monroe felt, felt, felt, felt. Must be how Marilyn Monroe felt, felt, felt, felt...- Finalizan las dos chicas de Sweet Nightmare.
-¡¿Dónde habíais escondido esas voces?!- Rosalya, junto con los demás, aplaude sonriendo.- ¡Ha quedado genial!
-Gracias...- Dinna se sonroja.- Ya que me toca cantar, al menos que sea una canción que me guste...
-Habéis hecho una buena elección. "Marilyn Monroe" será vuestra mejor canción de todo el espectáculo, lo estoy viendo.- Bromea Alexy.- Yo lo siento, pero no tenéis nada que hacer contra ellas.- Mira a Luke y a Max, que sonríen divertidos.
-Bueno, bueno. Luego llegaré yo con Fall Out Boy y ya me dirás.- El guitarrista se baja del pequeño escenario y coge una botella de agua.- Mañana... ¿A qué hora y a qué local vamos?
-A las ocho en el nuevo que hay a las afueras. Me han dicho que el sitio es bastante bueno.- Albert se acomoda en el sofá que hay allí.- Si os dais cuenta, última salida que hacemos juntos este año.
-¿Última? ¿Cómo que última?- Nyx le mira sin entender aquello.
-Rox se marcha a California, David a Canadá...
-Yo me voy una semana a Nevada...- Rosalya se encoge de hombros.- Pero se pasará rápido.
-¿A Nevada? ¿Tienes familia allí?- Aisha mira a la chica curiosa.
-Exacto. Estoy a dos horas de Las Vegas, si alguien está interesado, puede venir y hacerme compañía.
-¡Yo voy contigo!
-Tienes un serio problema con los juegos.- Alexy mira a su hermano.- Ni se te ocurra ir, que te arruinas.
-Pero qué dices.
-Con la mala suerte que tienes, seguro que lo pierdes todo en los casinos.- El rubio le sigue molestando.- Albert, las cosas hay que afrontarlas. Y si tienes mala suerte y problemas con los juegos pues...
-¡Pero serás imbécil!- El gemelo del pelo oscuro le lanza lo primero que tiene a su alcance.
-Relax, relax. Alber tío, que es tu único hermano, no le abras la cabeza.- Luke se empieza a reír. Aquel par de hermanos y sus peleas. ¿Qué harían sin ellos?
-Bueno, que a las ocho en el Black.- Sentencia David.- Poneos guapos, eh.
-Yo ya soy guapo.- Max sonríe pícaro.
-Cuánto ego.- Rox se ríe divertida.
-No lo puedes negar, preciosa.
   Esa respuesta le hace reír con más ganas. Quién le entiende.
-Creo... Que deberíamos irnos ya. Llevamos aquí toda la tarde.- Luke coge las llaves del local y les mira a todos.- Yo tengo ganas de llegar a casa, lo siento.
-¿Nos mandas a la calle?- Aisha intenta parecer ofendida.- Qué poca consideración por tu parte.
-Joder, entiéndeme.-El castaño abraza a su novia por los hombros.- ¿Te vienes a mi casa?
-Sí, vale. ¿Por qué no?- Rosalya le da un cariñoso beso.- Venga, ¡todos fuera!
   Entre quejas, palabras mal sonantes y algún que otro lloriqueo, abandonan el local para después cerrarlo con llave.
-¿Te llevo a casa, novata?- Max mira a la morena de ojos verdes.
-Vine con Nyx antes...
-He traído el coche.
-Nyx, te abandono.- Rox mira a su amiga, que hace pucheros tras haber escuchado aquello.- Lo siento tía, pero si lleva coche, llevará calefacción. Y tu moto, creo que no tiene.
-¡Traidora! ¡Más que traidora!- La rubia de ojos marrones se cruza de brazos, intentando no reírse.
-Pero si yo te quiero...
-Nada, nada. Vete con el egocéntrico.
-¡Eh! ¡No te pases rubia!- Max se ríe.- Bueno, vamos.
-Os veo mañana, ¡que paséis buena noche!- La joven se despide de todos y camina tras el guitarrista de los ojos grises.
-Buena noche la que van a pasar estos dos.-David señala a Rosalya y a Luke.- ¿Tienes protección?
-¡Llevo en el coche! ¡Te puedo pasar algo si quieres!- Max eleva la voz haciendo que todos se rían y que varias personas que pasan por allí, le miren de forma curiosa.
-¡Pero qué cerdos sois todos! ¡Claro que tiene protección!- Rosalya se ríe aún más al ver las caras que ponen Alexy y Dinna.- Joder, no me miréis así.
-Es que me lo he imaginado y, ¡ay qué asco!- La pelirroja niega con la cabeza.- ¡Para qué decís nada!
-No ahora en serio, ¿tienes o no tienes?- Albert saca la cartera de su vaqueros y de ella, un paquete plateado.
-Pero... ¿Albert?- Aisha se ríe al ver que él lo ha sacado como si nada.
-No me mires así, que es lo más normal de mundo. Un preservativo, no tiene nada de complicado.
-¿Qué haces con eso ahí?
-En algún lado hay que llevarlos, prevención.- Se encoge de hombros.- ¿Y si lo tengo que utilizar cuando menos me lo espero?
-Te digo yo con quién lo puedes usar...- Luke les mira divertido.- Bueno, que sí, que tengo en mi casa. Venga, hasta mañana...- Coge la mano de Rosalya se alejan por la calle dejando al resto del grupo con la broma y riendo.



   Se mira en el espejo por última vez, dándose el visto bueno. Tras esto, guarda algunas cosas en su bolso y sale de su habitación. En el pasillo se cruza con su hermano, quien también tiene intención de salir esta noche.
-Qué guapa vas, enana.- El chico le da un beso en la frente.- No bebas mucho, ¿de acuerdo? Si tienes algún problema, me llamas.
-Marco, que ya no soy una niña...
-Pero sigues siendo mi hermana pequeña y tengo que cuidar de ti.- Bajan las escaleras juntos y en la entrada de la casa se detienen.- Me voy con unos amigos, te veo mañana.
-De acuerdo, dale recuerdos a Anna.
-Se los daré. ¡Hasta luego!- Eleva la voz para que sus padres le puedan oír.
-Vale hijo, ten cuidado...- Su madre le mira desde el salón.
-¿Te llevas el coche?- Pregunta el padre mientras observa un partido de hockey por la televisión.
-Sí, me lo llevo.- Dicho esto, abre la puerta encontrándose de frente con un par de chicas.- Oh, para ti Aisha. Hola chicas.
-¡Hola!- Rosalya sonríe.- Bueno, ¿lista para la fiesta?
-Lista. ¡Adiós papá, adiós mamá!
-Adiós hija, ten cuidado.
   La chica asiente con la cabeza y sale por la puerta cerrando tras ella. Se fija en la vestimenta que llevan Rosalya y Nyx y sonríe al ver que no es la única que lleva vestido. La castaña ha escogido uno sin mangas y de escote algo pronunciado en color azul marino. Y ella... Bueno, ha preferido llevar un vestido con algo de abertura a la espalda y de media manga en color rosa pastel.
-Estás a tiempo, ¿llevas zapatos planos en el bolso?- Pregunta Rosalya curiosa.
-Sí, tranquila. Me acordé de coger las bailarinas.
-Perfecto, ¡vamos!- Las tres chicas suben en el coche de Nyx y ésta arranca para alejarse de la casa.- No sé si sois conscientes, pero llegamos tarde.
-Lo sé, pero no voy a correr.- Nyx mira la carretera con atención.- Joder, cómo odio que las calles no tengan casi iluminación.
-¿Te quejas por esto? Ya verás cuando estemos a las afueras...- Aisha suspira.- Una duda, al final... ¿Cuántos coches vamos?
-Los gemelos y David van en uno, Max y Luke en otro y, Dinna y Rox aparte. Cuatro coches.
-¿Y luego conducen...?
-Se supone que Alexy, Luke, Dinna y yo.- Nyx modera la velocidad y continúa con el trayecto.- Si lo dices por el tema de beber, tranquila, bebe lo que quieras, pero no me hagas llevarte a cuestas.
-Deberías conocerme, ¡yo me controlo!
-Bueno, pero por si acaso...
   Varios minutos después, la rubia consigue aparcar el coche y las tres salen del vehículo. Caminan hacia la cola que hay en la entrada y buscan al resto del grupo. Divisan a Luke y se acercan hasta ellos con paso ligero.
-¡Hola!- Saludan con una sonrisa.
-Por fin...- Albert también sonríe.- Estáis todas muy guapas, eh.
-Gracias, gracias. Eh, ¡no te has puesto camisa!- Rosalya se fija en que lleva una camiseta básica en color negro.- ¡Ni tú tampoco! Max, ¿tú igual? ¡Ya os vale!- La chica mira a su novio y al de los ojos grises con seriedad.
-No me iba a poner camisa para acabar borracho y sudando.- Max se empieza a reír.- Además, la camiseta es nueva y es bastante presentable.
-El blanco te queda muy bien.- Rox le dedica una sonrisa.- Bueno, nos han dicho que en quince minutos o así podemos entrar... Lo único malo del local, es que no guardan abrigos ni nada. Tendremos que estar con ellos.
-Nos turnamos, no os preocupéis por eso.- David abraza a Dinna, que intenta entrar en calor bajo su chaqueta de cuero.- El vestido te queda genial, pero te vas a resfriar...
-Para presumir hay que sufrir.- La chica sonríe orgullosa.
-Con lo cómoda que se va en vaqueros y tacones... Te pones una blusa bonita y arreglado.- Nyx niega con la cabeza.- Rox me entiende.
-Y tanto. Estoy yo como para ponerme vestido, me da algo.
-Habría sido interesante verte con un vestido, novata.
-¿Interesante?
-Podría haber disfrutado de tus piernas, y de otras cosas...- Max recibe un codazo por parte de la joven.- Sabes que no sería el único que disfrutase.- Otro codazo.- Oye, que no lo decía a malas.
-Lo sé, y por eso te doy.- La joven se ríe divertida.- Qué imbécil eres, Williams.
-En el fondo, sabes que te gustaría.
   Todos les miran divertidos y escuchan con atención aquella conversación. Últimamente, el tonteo que había entre ellos está muy presente...



   Entran en aquel local para continuar la noche. Se cansaron de esperar en el Black y han decidido ir a otro sitio. Según Alexy, tenían que celebrar el final de exámenes sí o sí y en Denver, poco podían hacer. Por eso han ido a terminar en Westminster por recomendación del rubio y Rosalya.
-No me lo puedo creer...- Dinna suelta una gran carcajada al escuchar la música que suena por aquellos altavoces.- ¡Nos van a dejar aquí tiradas!- Señala a los chicos del grupo.
-¡Qué dices! ¡Yo no me vuelvo a mi casa!- Albert niega con la cabeza.- ¿Vamos a por algo de beber y luego bailamos?- Propone mirando a sus amigos.
-¡Perfecto!- Grita Luke por encima de la música.- Iré a buscar una mesa, pedid una coca-cola por mi.
   Max asiente con la cabeza y junto a Albert, David y Alexy, camina hacia la barra para pedir.
-¡Yo me voy a bailar!- Nyx coge a Aisha del brazo.- ¡Vamos nena! ¡No te quedes parada!
-Yo... No tengo muchas ganas de bailar, en serio...- La joven suspira. Mientras estaban esperando en el otro local, tuvo un encontronazo con cierto individuo y aquello la ha desanimado en cierto modo.
-Oh, vamos... Hemos venido a pasarlo bien, ¡no pienses en Nathan!- Rosalya abraza a la chica por los hombros.- No merece la pena, bonita. ¡A disfrutar!- La joven menea las caderas haciendo que Aisha suelte una pequeña carcajada.
   Las tres chicas caminan hacia el centro de la pista, junto al resto de la gente. La música ha cambiado a una melodía pop y la gente, parece que se ha animado bastante más. Dinna y Rox, por su parte, no piensan quedarse allí plantadas y siguen a sus amigas. Los minutos pasan y hasta que Alexy no se acerca a ellas para avisar, ni recuerdan que los chicos están en una mesa tomando algo.
   Rox, Aisha y Rosalya deciden tomarse un descanso, mientras que ellos tres, bailan bastante animados junto a toda la gente que hay allí.
-¡Nos habéis dejado solos!- Luke sonríe burlón.
-Pero ya estamos aquí...- Rosalya le da un corto beso.- ¿Cuál es mi bebida?
-Te hemos pedido un Malibú con piña.- David se encoge de hombros.
-¡Así me gusta!- Sonríe ella mientras coge el vaso y bebe un trago.- ¡Vamos Luke!- Lo deja en cuanto la música cambia y suena una canción de género latino.
   El chico accede sin rechistar, cosa que a Aisha y a Rox les sorprende.
-¿Qué le habéis hecho al Luke que conocemos?- Se ríe la morena de ojos verdes.
-Que tengan un grupo de rock, no significa que no les vaya este tipo de música.- Albert se ríe.- ¡Te quedan demasiadas cosas por ver!
-¡Venga novata! Menos hablar y más bailar.- Max la abraza por los hombros y la conduce hasta el montón de gente que baila aquella canción.
   Él no va a ser menos y comienza a moverse al ritmo de "La Gozadera". Rox sonríe al ver que se desenvuelve bastante bien. Se une a Max y juntos bailan ante la mirada de su grupo de amigos. Alexy aplaude ante la escena, haciendo que ellos se rían.
-Me sorprende ver que te mueves tan bien, eh.
-Te sorprenderías de tantas cosas...- Sonríe burlón.- Y se formó la Gozadera... Miami me lo confirmó...
-¡Qué español más bueno!- Rox se ríe en tono de burla. Coloca sus brazos alrededor del cuello de Max. Éste sonríe ante el acercamiento.- Definitvamente, yo a vosotros no os conozco.
-No preciosa, está claro que no.- Se ríe.
   La canción llega a su fin y con ello, el baile que se habían marcado. Alexy y Dinna se acercan hasta ellos haciendo un cambio de pareja. Otra canción de ese estilo comienza a sonar, aunque a diferencia de la anterior, Max ya no se sabe la letra de ésta.
   No podían celebrar el final de exámenes de mejor manera, desde luego, aquel grupo de amigos sabe cómo disfrutar de las fiestas y las vacaciones.
-Yo... Me vuelvo a la mesa.- Nyx respira agitada.- ¡No puedo más!
-¡Vamos tía!- Aisha, que baila con Albert, le da un codazo.- ¡La que estaba tan animada!
-Necesito un trago, eh.- Se ríe.- Ahora vuelvo.
-¡Me voy contigo!- Alexy y Dinna se marchan con ella hacia la mesa, donde estaba Luke y David bebiendo.- Luke, ¡a bailar con tu novia! ¡Que está muy animada!
-Esta mujer, me quiere matar o algo. ¡No puedo seguir su ritmo!- El castaño se ríe mientras niega con la cabeza.
-Oye, no es por nada, pero si la cosa sigue así, lo mismo la noche acaba bien, eh.- David le guiña un ojo con complicidad.- ¡Tu fin de semana está siendo movidito! No te quejarás...
-¡David!- Dinna le reprocha divertida.- ¡No seas así!
-Lo mismo tienes razón...- Luke se pone en pie y choca la mano con su amigo.- Lo mismo esta noche me cae un polvo.
-Joder Luke.- Nyx se empieza a reír.- ¿En tu casa o en la suya?
-¡Donde me diga ella!- Eleva la voz mientras se aleja y eso les hace reír.
   La noche realmente se está animando para aquellos chicos de Denver.

martes, 13 de octubre de 2015

Capítulo 20.

   Cierra la taquilla de golpe y le mira seriamente. La mayoría de los alumnos se interesan por la discusión que mantiene la pareja. Es la última hora del día y las cosas no van a terminar de buenas maneras.
-Te lo estoy pidiendo de buenas formas, Aisha...- Nathan pierde la paciencia por momentos, cosa que en el fondo divierte a la joven.- Dame una explicación sensata.
-Te la he repetido tres veces, ¿estás sordo o qué te pasa? No quiero tener nada más contigo... Quiero dejarlo.- Suspira cansada.- Se acabó.- Cuelga la bandolera en su hombro y camina por el pasillo ante la mirada de todos.
   Aisha Dichiara, ¿dejando a Nathan? ¿La novata de último curso? ¡Esto no se ve todos los días!
-¡Estúpida! ¡El que lo quiere dejar soy yo! ¡No quiero nada más contigo! ¡Eres una p...!
-¿Esa es manera de salvar tu orgullo?- Una voz a su espalda le interrumpe.- Lo ha visto todo el pasillo, te ha dejado. No intentes ser el hombre que no eres.
-Petterson, cierra la puta boca.
-¿Por qué debería callarme?- Luke sonríe divertido.- Solo digo la verdad.- Pasa por su lado como si no hubiera pasado nada, hasta que Nathan le coge del brazo.
-Esto es culpa vuestra.
-Esto no es culpa de ellos.- Aisha se acerca con paso ligero y le da un empujón separándole de su amigo.- No han tenido nada que ver.
   Luke mira a la chica y hace un gesto con la cabeza. Ella asiente y se marchan de aquel pasillo hasta llegar al parking que hay fuera del instituto. El grupo les espera para hablar de algunas cosas que tienen pendientes.
-¡Por fin! Me cansaba de esperar.- Nyx sonríe, hasta que ve el serio rostro de su amiga.- ¿Qué ha pasado?
-Nathan y yo hemos terminado.- Murmura sin muchas ganas de hablar.
-¿Por qué? ¿Qué ha ocurrido?- David mira a la chica preocupado.- No habrá hecho alguna de las suyas, ¿verdad?
-No, no me ha hecho nada. Pero su actitud tan posesiva empezaba a cansarme. No soy propiedad de nadie y menos de un idiota como ese. Nyx sabe de lo que hablo.- Con mucho esfuerzo, intenta mostrar una sonrisa que acaba convertida en una mueca.- No importa chicos, estoy bien.
   Sin decir nada, Albert se acerca hasta ella y le da un abrazo que ella corresponde. Es lo que más necesita en aquel momento.
-¡Abrazo grupal!- Max se lanza hacia aquellos dos y los demás le siguen. Ese gesto les hace reír a todo, incluso a Aisha.- ¡Eso está mejor!
-Gracias.
-No las tienes que dar, tonta.- Rosalya le da un beso en la mejilla.- Bueno, esta tarde hay ensayo, ¿cierto?
-Cierto.- Dinna asiente con la cabeza.- ¿Vendréis?
-Nosotros tres sí.- Albert señala a Rox y a Nyx.- Ellos dos tienen cosas que hacer.
-¿Qué tienes que hacer, nena?- Luke mira a su novia.
-Vamos a mirar algunas tiendas de ropa... Digo yo, que tendréis que estar presentables.
-¿No se supone que eso lo hacíamos todos juntos?- Max no comprende nada.
-Vosotros estáis muy ocupados. Nosotros nos encargamos de seleccionar las tiendas y ya iremos todos juntos. No podemos perder tiempo.- Alexy sonríe.
-Pero...
-No hay peros que valgan. Ya lo hemos decidido.
-Bueno, bueno.- David alza las manos en son de paz.- Como siempre, a las cinco en el local.



   Llama al timbre de la casa y unos segundos más tarde, la puerta se abre. Ante ella, aparece un hombre de unos cuarenta años con una sonrisa.
-Debes de ser Rox, ¿me equivoco?
-No se equivoca, encantada señor Cornish. 
-Adelante, pasa. Nyx está en su dormitorio.- El padre de su amiga sonríe.- Subiendo las escaleras, la segunda puerta de la izquierda.
-Muchas gracias.- Ella sonríe y sube las escaleras siguiendo las instrucciones del hombre. La puerta está cerrada. Llama con los nudillos y escucha la voz de su amiga indicando que puede pasar.- ¡Hola! Pero, ¿qué haces?- Se empieza a reír al ver a Nyx.
-Calla.- La otra mete la cabeza por la ventana y sonríe divertida.- Estaba espiando al vecino. ¡Está muy bueno!
-¿Espiando? Pero si seguro que te ha visto...
-La intención es hacerse notar. Que no siempre vas a tener un vecino de veinte años que esté bueno... Digo yo, que me tengo que aprovechar de la situación.
-Vale, creo que no tienes remedio. Anda, cierra la ventana que hace frío.- Rox se sienta en la cama de la joven y se vuelve a reír al ver que antes de cerrar, se asoma de nuevo.
-Ya está, bueno.- La rubia de ojos marrones se sienta frente a ella en la cama y sonríe.- ¿Qué es eso tan importante que tenías que contarme?
-Se me ha ocurrido una gran idea para hacer promoción del concierto por el instituto.
-Dispara.
-Podríamos grabar a los chicos cuando ensayen alguna de sus canciones y poner la canción por los altavoces de los pasillos.
-¡Por fin! ¡Alguien que tiene ideas estupendas! Luego dicen que la loca soy yo...- Se ríe.- Me parece muy buena. ¿Cómo lo hacemos?
-Lo primero de todo, nadie puede saberlo, ni ellos. Es sorpresa.
-Perfecto.
-Lo podemos hacer con una grabadora, luego lo pasamos a un CD y lo ponemos en el instituto.
-Es una gran idea. Y se me está ocurriendo a mi otra.
-Dime.
-¿Qué te parece si hacemos promoción a lo grande?- Nyx sonríe divertida.- Y con promoción a lo grande, me refiero a la radio.
-¿La radio? ¿Y cómo quieres que lo hagamos? Nyx, una idea con pies y cabeza, por favor.
-Escucha. Conozco a uno de los locutores que trabaja en la radio de Denver. Puedo hablar con él y preguntarle si nos haría el favor de poner una de las canciones. Solo sería para anunciar el concierto. La gran mayoría escucha esa cadena, creo que es una buena idea...
-¿Y de qué conoces a ese locutor?
-Un lío pasajero, nada importante. La cosa es que creo que puede hacernos el favor.
-¡Nyx! ¡No conocía esa faceta tuya!- La morena de ojos verdes se empieza a reír.
-Bueno, todos tenemos nuestras cosas... Pero dime, ¿te parece buena idea?
-No es mala, pero primero habrá que conseguirlo.
-Ya me encargo yo.- Nyx suena muy segura de sus palabras.
   Rox mira la hora en el móvil y le hace un gesto a su amiga. Son las cinco y el grupo seguro que está en el local. Salen de la habitación y bajan las escaleras. Nyx coge las llaves y las dos chicas se despiden del padre de la joven.
-Toma.- Nyx le pasa un casco a su amiga y ella otro.
-¿Vamos a ir con la moto?
-¿Te dan miedo? Porque puedo coger el coche, eh.
-No me dan miedo, pero...
-Solo te fías de Max, ¿verdad?- Se ríe al ver que ella se sonroja.- ¿Cuántas veces has ido con él?
-Varias veces...
-Pues va a ser igual, sino que yo no soy él y lo siento, pero soy rubia y tengo tetas.- Ambas se ríen con aquel comentario.- Venga, no me seas. ¡Arriba!
   Rox obedece y sube tras su amiga.



   Otro día más que pasa en el instituto. Deja el examen sobre la mesa y abandona la clase, seguida de su amiga. Cierran la puerta y se miran entre ellas. Último examen de los muchos que han tenido.
-¿Crees que puedes aprobar?
-Sabes que me conformo con un cinco...
-No puedes conformarte con tan poco. Te lo has preparado bien, no pongas esa cara, Nyx.- Aisha camina por el pasillo.
-Sabes que la Química no es lo mío, pero bueno. Quedan cinco minutos para que empiece el almuerzo, ¿vamos a la cafetería?
   La joven asiente con la cabeza. Siguen vagando por los pasillos hasta llegar a la puerta del comedor. Ya hay algunos alumnos y para no perder el sitio, caminan hacia la mesa que ocupan a diario.
-Eh, ¿ese no es Max?- Aisha mira a través de la ventana. Hay varias personas fuera, pero es fácil reconocer al guitarrista.- ¿Está fumando?
-¿Te enteras ahora?
-No, pero pocas veces le he visto hacerlo.
-Sólo lo hace cuando está nervioso o le preocupa algo.- Luke se acomoda en una de las sillas, al igual que Rox, Alexy y Rosalya.
-Aunque lo haga de tarde en tarde, no debería.- Rosalya niega con la cabeza.- En fin, sois mayores y hacéis lo que os da la gana.
-Ah, pero... ¿Quién más fuma?- La italiana de ojos oscuros pregunta curiosa.- Está claro que os conozco poco...
-Fuman los dos hermanos, más éste que Albert.- Rox señala al rubio que tiene a su lado.- David, Dinna de vez en cuando...
-Y yo.- Nyx se encoge de hombros.- Pero ya sabes que no lo hago siempre. Sólo cuando os robo alguna calada.
-Pero igualmente lo haces.
-Ya, bueno. La pregunta, ¿qué le pasa?- La rubia mira de nuevo por la ventana. Max está apoyado sobre el muro que separa el centro del parking y realmente, parece más serio de lo habitual.
-Dianne tiene problemas en el trabajo. Están despidiendo a mucha gente y hoy tenía reunión con sus jefes...- Luke niega con la cabeza y suspira.- Está bastante preocupado.
-¡¿Qué?!- Alexy se sorprende al escuchar aquello.- Pero si lleva más de diez años en esa empresa...
-Los lleve o no, a cualquier persona pueden despedirla.- El castaño mira hacia la ventana.- Todo esto le supera. Pero no quiere hablar con nadie, prefiere callarse.
-¿No habla contigo tampoco?
-Tampoco. Y no quiero presionarle. Sabéis cómo es. Cuando venga, no mencionéis nada.
-Descuida...
-Voy a por una chocolatina, ¿queréis algo?- Rox se pone en pie y les mira. Al ver que ninguno quiere nada, se marcha en dirección a la barra. Espera a ser atendida y mientras, mira la variedad de chocolate que tienen en uno de los estantes.
-¿Vas a pedir?- Se gira para dedicarle una sonrisa.- Deja que lo adivine... Chocolate.
-Puede ser. Galletas de chocolate.- Asiente con la cabeza.- ¿Tú vas a comprar algo?
-Una botella de agua y un sándwich.- Max llama la atención de una de las camareras.- Me da un sándwich, una botella de agua y un paquete de galletas. Con chocolate.- Aclara.
-¡Eh!- Rox le mira divertida.- No tenías por qué comprarlo.
-Para una vez que soy generoso... No desperdicies la oportunidad.- Le guiña el ojo haciendo que ella sonría.- No te lo he dicho en toda la mañana, pero me gusta tu camiseta, eh.
-Creo recordar que a cierta persona le quedaba pequeña...
-Te queda muy bien. La próxima que te de, será de tu talla.- Max paga todo lo que ha pedido y caminan hacia la mesa.
-Pues a ver si es verdad...- Le remueve el pelo y coge su paquete de galletas. Ese gesto, ha conseguido hacerle sonreír de verdad, cosa que hoy, parecía algo imposible.
   El móvil del guitarrista suena al recibir un mensaje. Se sienta en una de las sillas libres y decide mirarlo. Suspira aliviado y se muerde el labio para después sonreír. Al final, todo ha salido bien.



   Último día del primer trimestre. Después de varias semanas estudiando, haciendo exámenes y trabajos, y de no tener tiempo ni para respirar, hoy oficialmente serán libres hasta dentro de tres semanas.
-Os nombraré por orden de lista y pasaréis a recoger las notas.- Fray empieza a llamar a sus alumnos en voz alta.
-Joder, joder.- Albert se muerde el labio nervioso.- Estoy suspenso, lo sé. Lo intuyo. Adiós a la Wii y a la Play.
-No digas tonterías, ¡si has estudiado mucho!- Dinna intenta animarle.- Seguro que apruebas.
-Ay mamá.- Suspira.- ¡No quiero pasar las vacaciones estudiando!
-Rosalya Hurley.- Nombra el profesor.
   La joven se levanta ante la mirada de su grupo y al coger el boletín de notas y verlo, empieza a gritar y a saltar.
-¡Que no me ha quedado Historia! ¡Que he aprobado!- Corre hacia su sitio haciendo que toda la clase se ría.- ¡Luke mira, mira! ¡Me ha puesto un seis!
-¡Esa es mi chica!- El castaño sonríe y mira con atención las notas de la joven.- Un ocho en Matemáticas, ¿de dónde ha salido eso?
-Nyx me ayudó bastante...
-Albert y Alexy Monroe.
   Los dos hermanos se ponen en pie y caminan hacia la mesa de Fray para recoger las notas. Sin decir nada, caminan hacia sus asientos y se dejan caer.
-Roxanne Olivier.
-Va, venga. ¿Qué notas tenéis?- Max les mira curioso.
-Toma, míralo tú primero por favor.- Albert le da el folio a su amigo y éste lo coge sin dudar.- Dímelo. He suspendido Historia y Economía, ¿verdad?
-Pues...
-Qué.
-Esto...
-¡Dímelo, joder!
-¡Has aprobado todo!- El chico de ojos grises sonríe.- Tío, ¡lo has conseguido! ¡Primer invierno que pasarás sin estudiar!
-¡Enhorabuena! ¡A mi tampoco me ha quedado nada!- Alexy abraza a su hermano y ambos lo celebran de una forma muy peculiar.
-¿Qué tal tus notas, novata?- Max mira a Rox con una sonrisa.
-Todo aprobado.
-Max Williams... El último de la lista.- Fray mira al chico y éste suspira.- No se lo tome así, le diré que no son tan malas como el año pasado. Ha mejorado bastante.
-Me puedo ir despidiendo de la libertad, señores.- Suspira y se pone en pie. Coge sus notas y las mira atento.- Pero, ¿qué...? Debe ser un error.
-No es ningún error, señor Williams.
-¿Cuántas te han quedado? ¡Porque a mi sólo me han suspendido Matemáticas!- Luke sonríe encantado.
-Historia.
-¿Una?- David le arrebata el papel y comprueba aquello.- Te has puesto las pilas, ¡eso es bueno!
-Querrás decir, que me las han puesto. De no ser por Rox, tendría Literatura y Economía también. Gracias.
-No me las des. Si necesitas ayuda con Historia, dímelo.- La chica sonríe levemente.
-La necesito, sí.
-Bueno, y ahora que ya tenemos las notas... La fiesta... ¿Para cuándo?- Dinna apoya la cabeza sobre la mesa y sonríe.
-Dijimos que para mañana.- Alexy también sonríe.- Pero esto lo podemos hablar cuando estemos los diez, ¿no?
-Sí, claro. Luego lo hablamos en el local, pero no os libráis de salir mañana.
-Rosa, no pensaba quedarme en casa. ¿Por quién me tomas?  Por mucha Historia que haya suspendido, mañana salgo.
-¡Ese es mi Williams!

viernes, 2 de octubre de 2015

Capítulo 19.

   Abre los ojos con dificultad y se extraña al no reconocer el lugar. Las luces están completamente apagadas, pero ella está tumbada en una cama y tapada con las sábanas. Se reincorpora y piensa por unos segundos.
-Mierda...- Murmura y mira a la persona que tiene a su lado.- ¿Albert? Albert.- Le zarandea del brazo.
-Mm...- El chico se remueve.
-Albert, ¡que me he quedado dormida!- Enciende la luz del escritorio y mira la hora en su móvil. ¡Son las dos de la madrugada!
-Ya lo sé...- La ronca voz del chico hace que se estremezca.- Y tus padres también lo saben... Y los míos...- Se da media vuelta para mirarla.- Llamaron hace unas horas y como ya estabas durmiendo, contesté yo por ti.
-¿Qué les dijiste?- Pregunta nerviosa.
-Que te habías quedado dormida y que si no les importaba, mañana te llevaba a casa. Tu madre dijo que no había ningún problema, solo que estaban preocupados al ver que no llegabas...- Bosteza y cierra los ojos.- Espero que no te moleste compartir cama.
   Aisha sonríe levemente y apaga la luz para volver a tumbarse. Se arropa y se gira quedando frente al chico, que intenta volver a dormir tras esa interrupción de sus sueños.
-Última vez que veo una película en tu casa. Mira lo que ha pasado.- Susurra divertida.
-¿Tan malo es tener que compartir la cama conmigo? Joder, me ofendes, eh.- Albert suelta una carcajada, que la hace reír a ella.- Sh... No te rías tan alto.
-Ay... Vale, vale.- La morena de ojos oscuros se acomoda y cierra los ojos.- Gracias por haber hablado con mis padres. De no ser por ti, lo mismo me matan.
-Creo que les he caído bien.- Dice alegre.
-Más bien que Nathan, seguro. No les agrada mucho...
-Malo, entonces.- Albert vuelve a bostezar.
-Ya me callo y te dejo dormir.- Sonríe en la oscuridad de la habitación.
-No seas tonta... Me gusta hablar contigo.
-Pero no a estas horas.
-No pasa nada, de verdad.- El chico se remueve en la cama.- Pero buenas noches, canija.
-Buenas noches, Albert.
   Durante un buen rato permanecen en silencio. Aisha da un par de vueltas intentando conciliar el sueño, pero ya se ha desvelado y no le está resultando nada fácil volver a dormir.
   Albert, por su parte, se da cuenta de eso y sin decirla nada, la abraza y se acerca ella.
-Como sigas dando vueltas... Te vas a caer de la cama.- Bromea él.
-No creo. ya me has sujetado tú.- La chica se ríe y se da media vuelta, quedando frente a él, como minutos antes estaban. Albert no se aparta, y eso le agrada.- Hasta mañana.- Le da un corto beso en la mejilla.
-Hasta mañana...- Él se lo devuelve en la frente y tras eso, sonríe.
   Para ambos, aquella situación significa el comienzo de muchas cosas... Y el final de otras.



   Recorren el centro de Denver entre divertidas conversaciones y risas. Hacía bastante tiempo que no pasaban un día juntas, pero todo sigue como siempre. Entran en una cafetería y se acomodan en una mesa que hay al final del pequeño local. Un camarero toma nota de lo que quieren y se marcha de allí dejando que retomen su conversación.
   El tiempo pasa y ellas sieguen hablando mientras comen, hasta que el móvil de Dinna comienza a sonar. La chica, al ver el número en la pantalla, responde con rapidez.
-¿Diga? Sí, sí. Soy yo.- Escucha atenta las palabras de la otra persona.- Pero... ¿Puedo hacer la visita?
 Sí, de acuerdo. De cinco a siete. Perfecto, Iré esta tarde, hasta luego.- Cuelga y se muerde el labio nerviosa.
-¿Ocurre algo?- Nyx pregunta curiosa y algo preocupada por los gestos que ha hecho su amiga.
-Es largo de contar...
-Tengo tiempo.
   La pelirroja bebe un trago de su refresco y suelta un suspiro. No ha hablado del tema con nadie, pero contarle esto a alguien, puede que le siente bien.
-Tú... ¿Sabes lo de mi hermano?
-Sí... ¿Ha pasado algo con Dylan?
-Hace dos semanas, volvió a casa. Aceptó nuestra ayuda y desde ese día, está en el centro de nuevo.- La chica hace una breve pausa antes de continuar hablando.- Normalmente, cuando ingresan a alguien, no puedes verle en un tiempo, pero soy así de pesada, que les insistí a los médicos con ir a visitarle y por eso viene la llamada. Dicen que puedo verle hoy en el horario de visitas.
-Eso es bueno, ¿no?
-Supongo que sí.- Suspira.- No sé qué decirle, ni qué hablar con él, Nyx. Llevamos años sin tener comunicación. Somos como dos desconocidos y es mi propio hermano.
-Cielo... Es una situación muy delicada, pero no puedes pensar de esa forma. Cuando le veas, dale cariño. Va a ser difícil, tanto para él como para ti, lo sé. Pero Dylan tiene que ver que le importa a alguien. Lleva mucho tiempo metido en ese mundo y se ha cerrado a todo. Tenéis que conseguir que se abra de nuevo y la mejor manera, es demostrarle que estáis con él pese a todo.
-Me vas a hacer llorar... Qué bien hablas, cabrona.- Dinna sonríe levemente.
-No digas tonterías. Mira, cuéntale cosas sobre ti, sobre lo que haces con nosotros, sobre tu vida. Dale la oportunidad de sentir que tiene una hermana que confía en él.- Nyx bebe un trago de su vaso y da un mordisco a su comida.- Si quieres, puedo llevarte al centro y a la salida te paso a buscar. Solo si quieres.
-¿Podría venir David? Él no sabe nada de esto, pero estoy segura de que si me acompaña me sentiré mejor.
-Claro, dile que a las cuatro pasamos a buscarle. ¿El centro está muy lejos?
-A cuarenta y cinco minutos de Denver...
-Bueno, pues vas a tener todo ese tiempo para explicárselo a tu novio y para poder pensar lo que hablarás con tu hermano.- La rubia coge la mano de la chica y le da ánimos con aquel gesto.- Todo va a salir bien, hazme caso.
-Eso espero...
-Que sí. Y verás como con todo esto y la ayuda de los médicos, Dylan volverá a ser el de siempre.
-Ojalá, pero una parte de mi desconfía de él.
-Lo entiendo, pero si esta vez ha accedido a recibir vuestra ayuda... ¿Por qué pensar de manera negativa? Él ha dado el primer paso y el más importante: ha querido poner remedio a su adicción con las drogas. Es cierto que va a ser difícil depositar vuestra confianza en él, tanto por tu parte como por parte de tus padres, pero tenéis que intentarlo.
   Las dos amigas se quedan en silencio tras lo último que ha dicho Nyx. Dinna lo piensa por unos segundos. Como ha dicho la chica... Tienen que intentarlo.



   El señor Fray intenta poner orden en aquel aula de último curso. No le resulta sencillo tener que lidiar con los veintisiete alumnos de su clase.
-Señores, por favor... Es importante.- Resopla.- Ya tenemos las entradas para el concierto.
-¿Lo dice de verdad? ¡Genial!- Alexy sonríe.
-Bien, por fin me hacen caso... Bueno, ¿han pensado en la organización? ¿Cómo pretenden lidiar con el concierto?
-¿Podemos salir un momento y explicarlo?- Rosalya se pone en pie al ver que Fray asiente con la cabeza.- Vamos. Que salga alguien más conmigo.
-Ya vamos.- Los gemelos y Rox también se levantan y caminan hacia la pizarra. Miran a toda la clase y Albert rompe en carcajadas. La morena de ojos verdes se contagia de su risa y acaba roja de la vergüenza al ser el centro de atención junto a su amigo. Como no tienen unas risas llamativas ni nada...
-¿Qué os pasa?- Rosalya les mira divertida.- Dejad de reír, ¡así no se puede!
-Perdón, perdón... Pero yo y hablar en público...- Albert se seca las lágrimas.- Ay...
-¡Basta! Que me duele la tripa...- Rox se abanica con las manos.
-Señores... ¿Pueden proceder a dar la información?- Fray sonríe intentando no reír junto a esos dos.
-Ya va, ya va.- Alexy niega con la cabeza y suspira. No tienen remedio.- Bueno, habíamos pensado contar con la ayuda de la otra clase. Necesitamos que algunos se encarguen de vender las entradas, de hacer promoción... Rosalya y yo pensábamos encargarnos de la escenografía y para eso necesitamos que como mínimo, nos ayuden diez personas más.
-Yo pretendía encargarme de todo el tema informático: iluminación, sonido... Pero también necesito ayuda y sé que a varios se os da bien este tipo de cosas.
-Yo puedo ayudarte.- Uno de los chicos que ocupa la tercera fila le mira sonriendo.
-Perfecto. Lo que pensábamos hacer era pasar una hoja en la que os apuntéis y digáis lo que queréis hacer. Tenemos que poner todos de nuestra parte.- Rosalya se apoya en la mesa del profesor y les mira.- Hablaremos con los de la otra clase y nos organizaremos cuanto antes.
-Y bueno...- Rox llama la atención de todos.- Necesitamos que alguien supervise que todo vaya en marcha. ¿Voluntarios?
-Tú misma, tía.- Dinna mira a su amiga divertida.- Podrías hablar con Nyx y si eso, con Brandon y el delegado de la otra clase. Entre los cuatro, podéis supervisar el trabajo.
-¿Qué?- Brandon se encoge en su sitio.- Yo... No creo que sea el adecuado para supervisar nada. Prefiero hacer promoción...
-Pues entonces no sé quién os puede ayudar...
-Yo te puedo ayudar con eso...
-¿Tú ayudar? ¡Bastante que vas a actuar!- Rox niega con la cabeza interrumpiendo las palabras del guitarrista.- Max, ni de coña.
-Señorita Olivier...
-Perdón.- Sonríe tímida.- Vosotros tenéis más trabajo que todos nosotros. Tenéis ensayos, pruebas de sonido y encima pretendéis componer. ¿Crees que estás en disposición de ayudarme?
-Bueno, no sé.- El chico de ojos grises lo piensa por unos segundos.- Habla con Nyx y hacedlo las dos. Si necesitáis ayuda, solo tenéis que decirlo.
-Tranquilo, se las arreglarán. Ya las conocemos.- David le guiña un ojo a la chica.- Bueno, ¿tenéis algo más que decir?
-¡Sí! Ya sabemos la hora exacta a la que será el concierto.- Alexy coge una tiza y lo apunta en la pizarra.- Viernes 20 de febrero, siete y media de la tarde. Auditorio de Denver.
-¿Viernes?- Pregunta una de las chicas de la clase.- ¿No es un poco precipitado? Podría ser un sábado.
-Ese día, todos los alumnos que estén ayudando con el concierto, no vendrán a clase.- El profesor Fray les mira divertido.- En especial el grupo que actuará. La directora y los profesores lo estuvimos hablando y a todos nos pareció lo correcto.
-¡Bien! ¡Eso significa que voy a poder dormir más tiempo!- Luke aplaude mientras suelta una carcajada.- Esto del concierto es lo mejor que podría habernos pasado, eh.
-Como si ustedes no encontrasen la forma de faltar a clase... Por cierto, ¿con qué repertorio nos van a deleitar? ¿Han pensado en algo?
-Por el momento podemos decir que el rock, es lo que más predomina.- David sonríe.- Aunque hay canciones de pop y alguna balada por ahí suelta.
-Escucharéis mucho Fall Out Boy, aviso.- Max sonríe.- Así que, os podéis aprender un par de canciones de ese grupo.
-Y por cierto, veremos a Dinna y Aisha cantando...- Luke sonríe.
-¡¿Qué?! ¡Ni en sueños! Yo toco el bajo y hago coros. ¡No pretendas que me ponga a cantar! Suficiente hago ya.- La pelirroja niega con la cabeza.- No me veréis cantar, os lo aseguro.
-Vaya que no...- David mira cómplice a Max y a Luke.- Aquí vamos a lucirnos todos.



   Se sienta en las escaleras esperando a que alguno de sus amigos salga del examen. Por suerte, en cosa de minutos, Rox sale del aula. Le ve y se acerca hasta él.
-¿Cómo te ha ido?- Pregunta mientras se deja caer en un escalón.
-¡Bastante bien!- Albert sonríe.- Pensé que sería más complicado...
-Pues has visto que no. Pero los demás van a tardar en salir, por lo que he podido ver.- La morena de ojos verdes se encoge de hombros.- Bueno, me dijiste que me tenías que contar algo.
-Ah, sí...- Se sonroja.- Aisha durmió en mi casa el sábado.
-¿Qué dices? ¿Y eso?- Pregunta divertida.
-Estábamos viendo una película y se quedó dormida... Llámame loco, pero creo que las cosas entre nosotros mejoran.- Suspira.- No sé, sino fuese por Nathan, tal vez podría intentarlo. Pero con él de por medio...
-¿Quién dice que no puedas intentarlo? No te digo que te lances de cabeza a la piscina, pero poco a poco, puedes conseguirlo. Por lo que Nyx me ha contado en el almuerzo... Aisha lleva sin estar de buenas con él desde que supo lo que pasó hace unos años.
-No es motivo para que haga eso... A ella no le ha hecho nada.
-Puede que no sea motivo, pero a lo mejor se comporta de esa forma porque le importamos, o tal vez sea una forma de evitar un posible daño.- Rox se peina con las manos.- No llevo mucho con vosotros, al igual que ella... Pero empiezo a conoceros y a ti ya te tengo pillado. Eres una persona muy espontánea, aunque eres algo tímido. También eres sensible y sabes apreciar a la gente que te rodea. Puede que seas un poco friki, como dice tu hermano, pero eres una persona que merece la pena conocer. Y estoy segura de que Aisha sabrá apreciarte si le muestras cómo eres realmente.
   El gemelo de pelo oscuro sonríe emocionado ante aquellas palabras y abraza a la joven. Ella le devuelve el abrazo y están así por unos segundos.
-Nunca te lo he dicho, pero empiezo a verte como mi mejor amiga.
-Lo mismo puedo decirte.- Sonríe de nuevo.- Y ahora que estamos en este momento tan emocionante... ¿Puedo contarte algo sin que me digas que soy estúpida o algo parecido?
¿Qué ha pasado?
-Max y yo nos besamos el sábado.- Los colores suben hasta sus mejillas ante la cara de asombro que muestra Albert.
-¿Y qué ha pasado? ¡Porque no he visto ni un solo beso en toda la mañana!
-Que le dije que necesitaba tiempo para aclararme... Pero que no descartaba la posibilidad de que pasara algo en un futuro.- Suspira.- ¿Crees que he hecho bien?
-Al igual que me acabas de decir, yo también empiezo a conocerte. Y sé que le has dicho eso por el simple hecho de que has pensado en Brandon. Pero... Piensa en ti por un momento y piensa en cómo son los dos.
-Son polos opuestos.
-Ahí tienes la respuesta. Max y tú también sois polos opuestos... Entre vosotros hay una atracción que se ve a kilómetros, algo que por ejemplo no te sucede con Brandon. Puede que con él haya algo de tonteo, pero realmente saltan chispas entre tú y Max.- El chico se acomoda en la escaleras y mira la puerta de la clase.- Pero es cierto que a lo mejor necesitas tiempo para aclarar tus ideas.
-No sé qué hacer.
-Piensa en lo que te aportan los dos. Los pros y los contras.- Albert le remueve el pelo.
-Lo pensaré. Eres el único que lo sabe...
-No diré nada. No soy quién para hablar de ello.
   La puerta de la clase se abre y el resto del grupo sale del aula. Se ponen en pie y se acercan hasta ellos para preguntarles por el examen de Historia. A todos les ha ido bien.
-¿Os dais cuenta que esta semana acabamos los exámenes?- Luke se apoya sobre las taquillas.
-¿Os dais cuenta? En dos semanas nos dan las vacaciones y las notas. Adivinad a quién le van a confiscar la consola.- Albert hace pucheros.
-No pienses así...- Rosalya intenta animarle.- ¡Podríamos salir este fin de semana!
-Imposible, tenemos ensayos.- Max se encoge de hombros.- La semana que viene, si queréis.
-¡Perfecto! Que nadie haga planes, ¡nos vamos de fiesta!