viernes, 27 de marzo de 2015

Capítulo 2.

   Las primeras horas han pasado rápidas y por fin tienen un descanso para distraerse, cosa que a todos les entusiasma. Camina hacia la cafetería acompañada por los chicos que ha conocido en las últimas horas.
-¿Queréis algo? Voy a comprar.- Luke les mira a todos.
-Una botella de agua y una manzana, por favor.- Rosalya sonríe y se sienta en una de las sillas que rodean la mesa que han escogido.- Rox, ¿quieres algo?
-Agua, gracias.
   Todos le piden algo al chico de pelo castaño y ojos marrones. Él se marcha y el tema de conversación que tienen ahora se centra en conocer a la nueva alumna del Instituto St. Might.
-¿Has cambiado de cuidad?- Alexy pregunta con curiosidad.
-No, antes vivía a las afueras. Solo he cambiado de casa y de centro.
-¡Eso está bien! ¿Vives por aquí cerca?
-Bueno, vivo más cerca del centro comercial, pero estoy a quince minutos.
-¡El centro comercial!- La chica que está a su lado sonríe emocionada.- Un día podrías venirte con nosotros de compras o a dar una vuelta, ¡lo que quieras!
-Yo que tú, no iría con estos dos.- Albert señala a su hermano y a la joven.- Corres el riesgo de tener un nuevo fondo de armario. Por no decirte que te arruinas…
-¡No exageres!- Rosalya también se empieza a reír.
   Luke aparece con dos bandejas llenas de cosas, y acompañado por otros dos jóvenes. Estos saludan animados.
-Parejita, ¿dónde os habíais metido?- Albert sonríe pícaro.
-Tuve que ir a la tienda de música, necesitaba una púa nueva. Anda, ¿eres nueva? ¡Soy Dinna!- La chica se presenta amable.
-Soy Rox, encantada.- La morena sonríe y se fija en el chico que hay a su lado. Se lleva una grata sorpresa.- ¿David?
-Pensé que no me recordarías. ¡Cuánto tiempo!- Se dan un fuerte abrazo.- ¿Qué haces aquí? Nadie me dijo que te mudabas.
-No sabía que estudiabas en este centro. Mis padres encontraron una casa por aquí y me tuve que mudar. De todas formas… En Judes todo ha cambiado...- Rox se encoge de hombros pero sigue sonriendo.- ¿Es tu novia?
-Exacto. Dinna es mi novia.
-¿Os conocíais?- Luke les mira divertido.
-Fuimos juntos a clase, hasta que yo me vine aquí. Teníamos el mismo grupo de amigos y demás. Pero luego no supe más de ellos.- David se sienta en una de las sillas.- ¿Y los demás? ¿Qué ha pasado con toda esa gente?
-Digamos que algunos empezaron conocer gente, otros dejaron los estudios o simplemente, entraron en el mundo de la noche…
-Me marcho cuatro años y se os cruzan los cables, no me jodas.
-Qué compañías más buenas…- Max sonríe irónico.- En fin, ¿vamos a ensayar esta tarde o no?
-¡Sí! Por eso es tenido que comprar la púa.- Dinna juguetea con el accesorio de plástico y después les mira a todos.- ¿Vendréis a vernos?
-Pues claro, tengo ganas de escuchar las nuevas canciones.- Alexy bebe un trago de su refresco y sonríe.
   El descanso llega a su fin y la campana anuncia el comienzo de otra clase.  Se levantan de sus asientos y salen de la cafetería.



   Se sienta en aquella butaca, como siempre. Es su sitio desde los últimos tres años. Mira cómo David y Dinna ensayan juntos y después centra su atención en la pantalla de su móvil.
-Estaría bien tener a tu pareja en el grupo, ¿no crees?
   Max mira a su mejor amigo y se empieza a reír como si la vida le fuese en ello.
-Luke, te agobiarías con facilidad. Imagina estar todo el día con tu novia.
-No me refiero a eso. Sabes que ellos no son tan empalagosos.- El chico se encoge de hombros.- ¿Empezamos a ensayar o te piensas quedar toda la tarde ahí sentado?
-Voy, voy.- Max se levanta de su cómodo asiento y camina hacia el escenario que tienen allí. Coge su guitarra eléctrica y toca algunas notas sueltas.
   Después de eso, junto a los demás, empieza a tocar la melodía de una nueva canción.
   La puerta del local se abre. Rosalya, los gemelos y Rox entran allí. La recién llegada y el guitarrista cruzan un par de miradas, pero el chico de ojos grises sigue concentrado en tocar la canción sin equivocarse.
-Se le da bien, ¿verdad?- Rosalya, que no ha podido evitar verles, mira a la joven. Ésta asiente con la cabeza.- Max puede parecer muy reservado, pero en el fondo es realmente majo. Aunque sus bromas sean muy pesadas y haya que tener paciencia con él... Te acostumbras al final.
-Eso espero…
-Sí, créeme. Luke es muy despistado, pero es un cielo...
-Claro, de Luke no dices nada negativo, ¿eh? Qué lista.- Alexy se une a la conversación haciendo que la castaña se sonroje.- Luego está Dinna, que es la responsable del grupo. Ya has visto que es muy sociable. Y bueno, ya conoces a David.
   La canción llega a su fin. David deja las baquetas de la batería a un lado y se levanta de su asiento para saludar a los que acaban de llegar.
-Al final has venido.- El joven mira a su amiga.
-¡Hola Rox! Bienvenida a nuestro estudio personal.- Dinna abraza a la chica.- ¿Te gusta?
-Es bastante grande.- Sonríe.
-¿Sabes tocar algún instrumento?- Luke pregunta curioso.
-Sé tocar la guitarra… Sólo eso.
-También cantas.- David hace que se sonroje.- ¡No miento! Cantas y muy bien, además.
-Uh… Max, entran en tu terreno.- Alexy sonríe divertido.
-Oh, vamos. Nadie me supera con la guitarra.- El chico mira a la joven con seriedad.- Lo sabéis de sobra.
-Es broma…- Albert le da unas palmadas en el hombro.- Ya conoces a mi hermano.
-En fin.- Resopla.- ¿Pensamos seguir parados o vamos a seguir ensayando? Se supone que hemos venido a eso.
   Rox se siente incómoda ante la frialdad con la que habla Max. Se queda callada y ve cómo suben al escenario de nuevo.
-No se lo tengas en cuenta…- Rosalya ladea la cabeza.- Es así de idiota.
-No importa… Creo que será mejor que me vaya.- La morena coge sus cosas y le da un abrazo a la chica.- Nos vemos mañana en clase.
-No seas tonta… No te vayas.- Alexy se acerca a ella.- Pasa de él.
-Prefiero no molestar, no parece cómodo... Hasta mañana chicos.- Se despide y marcha del local.
   El rubio de ojos azules se cruza de brazos y mira al guitarrista.
-Sólo era un comentario, creo que te has pasado.
-No he dicho nada.- Max deja la guitarra a un lado.
-No lo habrás dicho, pero tu tono de voz lo insinuaba. Con esa actitud no tendrás novia en tu vida ¡Las tías huyen de ti!
-Bueno, habló aquí el señor de las bromas.- Max le mira serio.- Tendrías que ver tu actitud, ¡tú tampoco tendrás pareja a este paso!
-Bueno, no empecéis con eso...- Dinna les corta la conversación y mira al culpable de que Rox se haya marchado.- No habrás dicho nada, pero eres un borde cuando quieres. ¿No puedes ser más amable? Es nueva, intentamos conocerla y que se sienta cómoda con nosotros. Pero vamos, que la has espantado.
-Y dale... Me ha sentado mal el comentario de Alexy, él tiene la culpa.
-Yo no la tengo, ¡no sabes aceptar una broma!
-¡Bueno ya está!- Rosalya intenta poner orden en el local.- Mañana hablas con ella y te disculpas. Punto y final.
   David y Luke se ríen. Aquella situación les parece divertida, aunque no les ha gustado que la chica se fuera...



   Apaga el cigarro y comprueba la hora, justo en ese momento, suena el timbre que da inicio a la siguiente clase y entra por el pasillo. Ha faltado la dos primeras clases y con eso ya es suficiente. ¿Para qué levantarse pronto cuando puede dormir un par de horas más?
   Llega al aula y deja sus cosas en el sitio de siempre.
-Faltando, como de costumbre…- Albert le saluda estrechando la mano.
-Ya me conoces. ¿Y la novata? Tengo que hablar con ella.
-Por ahí llega, ¡ánimo!
   Max mira hacia la puerta y ve que la joven entra en el aula junto a Dinna y Rosalya. Se acerca hasta ellas y mira a Rox.
-¿Puedo hablar contigo?
-Sí, claro.
   Salen de la clase para poder hablar sin los murmullos de los demás.
-Te debo una disculpa por lo que pasó ayer. Sé que no debí hablar con ese tono y que di a entender algo que no era…- Por unos momentos, Max se fija en el aspecto físico de ella. No hay nada de especial, salvo esos ojos en color verde, que son realmente bonitos.- Lo siento.
-No te preocupes. Todo fue un malentendido y punto.- Rox se encoge de hombros.- Disculpas aceptadas.
-Si quieres, puedes venir esta tarde. Hoy también ensayaremos.
   Ella lo piensa por unos segundos, pero después asiente con la cabeza aceptando la invitación.
-Señores, entren a clase…- El profesor Fray llega con su maletín y su carpeta. Les mira divertido y sonríe.- Tienen el recreo para flirtear y demás.
-¡No estábamos haciendo nada!- Max resopla.- Por una vez en la vida no intento ligar con una tía.
-Pues qué raro.- Dinna se ríe al igual que el grupo de amigos.
-Idiota.
-Esta idiota te cae bien, ¡y lo sabes!
   El de los ojos grises asiente con la cabeza y se deja caer en su sitio, junto a Luke.

sábado, 21 de marzo de 2015

Capítulo 1.

    Sigue allí sentada esperando su nuevo horario. No deja de mirar el despacho, ya que no tiene nada más interesante que hacer en este momento. La espera llega a su fin y la puerta se abre. La directora del centro se acerca a ella y le extiende varios folios con los horarios, las aulas, los nombres de los profesores…
-Esto es todo lo que necesita señorita Olivier.- La mujer muestra una amable sonrisa.- Espero que le agrade su estancia aquí durante este curso y…- El sonido del timbre la interrumpe por un breve momento.- Vaya  clase. Que tenga un buen día.
   Se despide y sale allí con los nervios a flor de piel. Cualquiera en su lugar la comprendería. A nadie le gusta ser el nuevo y desde luego que ella no es la excepción. ¿En qué momento tuvo que mudarse? Mira el horario sin saber hacia dónde tiene que ir. Esto es demasiado grande y hay mucha gente.
-¡Oye! Ten un poco más de cuidado.- Aquella voz y el golpe que se acaba de dar con ese joven, le sacan de sus pensamientos.- Eh, ¡una novata!
-Un respeto, ¿no? Joder…
-Bueno, que encima tiene carácter.- El individuo se ríe.- A ver…- Coge el horario que sostiene en su mano y lo mira por unos momentos.
   Ella se fija en el aspecto físico de él y esboza una leve sonrisa. Es bastante alto, de pelo rubio y unos bonitos ojos azules. Tiene unos hombros anchos y parece que se cuida. Sin duda, destaca entre los demás alumnos.
-Estás conmigo, vamos.
-Mm… Vale…- Le sigue por aquellos pasillos llenos de alumnos. Aquel primer encuentro no ha sido muy agradable, pero por lo menos va a llegar a clase sin perderse.
-¿Cómo te llamas, novata?
-Roxanne Olivier, pero llámame Rox. ¿Y tú eres…?
-Alexy Monroe.
   Ella asiente con la cabeza y ve que entra en una clase. Les saluda a todos con una gran sonrisa.
-¡Os presento a Rox! Es nueva, y me acabo de chocar con ella.
-Tienes una costumbre muy mala de llevarte a la gente por delante, eh…- Una joven se acerca hasta el chico y le abraza. Después desvía su vista hacia ella y muestra una sonrisa agradable.- Soy Rosalya, amiga de este idiota.
-¡Eh!- Alexy se ofende con aquel comentario, pero después le remueve el pelo como venganza por decir aquello.
-Vete a la mierda…- La chica se ríe.- Ven, siéntate conmigo.
-No le has preguntado si quiere sentarse contigo. Yo que tú, no lo haría. Está loca… Así como dato.
   Rox se empieza a reír. Se nota que esos dos se llevan muy bien.
-¡Alexy! ¡Eres un imbécil!- La voz de alguien desconocido resuena por toda la clase. Un joven, idéntico a él, aunque con el pelo oscuro, se acerca hasta el chico con paso decidido.
-¿Son gemelos?- La recién llegada pregunta curiosa.
-Exacto.- Rosalya sonríe de nuevo.- Pero sinceramente, son dos polos opuestos. Como el agua y el aceite, pero bueno. Son hermanos al fin y al cabo…
-¡Que me has dejado tirado en el aparcamiento!- El gemelo le da una colleja a su hermano.- ¿Qué clase de hermano eres tú?
-Albert Monroe, ocupe un asiento libre y deje de atacar a su hermano…- El primer profesor del día entra sujetando un maletín y una carpeta.
   Ambos caminan hacia el final de la clase, al igual que hacen ellas dos.
-Eh, ¡alguien nuevo!-  Albert sonríe divertido.
   El profesor comienza a pasar lista, deteniéndose en la nueva alumna. Ella se pone nerviosa y suspira, no le está siendo nada fácil.
-Roxanne Olivier, ¿acaba de ingresar en el centro?
-Sí…
-Soy el profesor Fray. Imparto la clase de Economía y seré vuestro tutor durante vuestro último año.
-¿Otra vez?- Rosalya suspira.- ¡Que ya es el segundo año!
-Señorita Hurley, no empiece con mal pie. ¿Debo recordarle que esa actitud no le llevará muy lejos?- El hombre sigue pasando lista como si no hubiese tenido que detenerse.- Luke Petterson, como siempre, faltando. Supongo que el señor Williams tampoco estará.
-Supone bien.- Albert suelta una carcajada.- Si hubiesen venido, lo habríamos notado.
   Justo en ese momento, la puerta se abre. El profesor Fray desvía su vista y niega con la cabeza.
-Luke, llega tarde el primer día.
-¡Señor Fray! ¡Otro año más!
-¿Y te alegras?- Rosalya resopla.
-Ocupe su asiento y no me interrumpa más.- El hombre esboza una sonrisa.- Otro año soportándoles… ¿Y el señor Williams?
-Llevo sin verle desde el fin de semana… No sé dónde se ha metido.- El tal Luke ocupa el asiento que hay libre delante de Alexy.
   Fray termina de pasar lista y empieza a explicar el temario del último año. Algunos toman los primeros apuntes del curso, mientras que otros simplemente se limitan a escuchar. El tiempo pasa rápido y con ello, llega el final de la primera clase.
-Voy al baño, ¿quieres que te enseñe el instituto?- Rosalya mira a Rox.
-Claro.- La chica se levanta de la silla y junto a su compañera, sale de clase.
   Rosalya saca cualquier tema de conversación intentado que ella no se sienta incómoda, cosa que consigue desde el primer momento. Le alegra saber que su primer día no ha empezado tan mal.
   Entran en el baño y Rox se fija en la chica. Rosalya es algo más alta que ella, tiene un bonito cuerpo, ojos claros y una larga melena en color café. Luego fija su vista en sí misma. Pelo negro a la altura del pecho, es de mediana estatura, ojos en color verde... En general, está cómoda con su cuerpo. Nunca ha destacado por su físico, pero ella es feliz así tal cual.
-Debemos volver a clase, nos toca Diseño y la profesora es demasiado puntual, te lo digo por experiencia…- Rosalya se ahueca el pelo con las manos y sonríe.- Vamos.
   Recorren el pasillo, aunque esta vez, suben unas escaleras y entran en una de las clases que hay en la segunda planta. Todos los alumnos están sentados en las mesas o están de pie hablando.
-¿No ha llegado?
-Qué va.- Alexy se encoge de hombros.- Está de baja, no vendrá durante las dos primeras semanas… Estaba esperando a que vinieseis, ¿vamos a la clase de Música?
-Sí, ¿por qué no?- Rosalya deja su mochila sobre una de las mesas.- Ahora volvemos, puedes dejar las cosas aquí, si quieres.
-De acuerdo…- Rox imita a la chica y salen de allí. Ella no dice nada y simplemente, les sigue por el pasillo hasta que se detienen frente a una puerta. Alexy llama con los nudillos y abre tras escuchar un permiso para poder pasar.
-¡Hola señorita Reid! ¿Podemos entrar?
-Claro, pasad.- Una mujer joven les mira sonriendo.- A ti no te conozco…
-Es nueva.- El rubio cierra la puerta de la clase y se sienta sobre una de las mesas que hay libres. Rosalya le imita y Rox se une a ellos. Después hace una breve presentación de la chica.
-¿No habréis visto a…?
   La puerta se abre interrumpiendo las palabras de la señorita Reid y un chico entra en el aula. Sonríe a modo de saludo y ocupa un asiento al fondo de la clase junto a Albert y a Luke. Por lo que Rox ha podido comprobar, es alto y de hombros anchos. Tiene el pelo oscuro con algo de melena y una mirada en color gris bastante atrayente.
-¿Me he perdido algo?- Su voz es grave, aunque suena realmente bien.
-Sí, mira.- Alexy señala a la morena de ojos verdes que está sentada a su lado. Ella se sonroja al momento y esto le hace reír.- Me he chocado con ella por el pasillo y oye, ¿por qué no acogerla?
-¿Qué?- Pregunta el chico riendo.- ¿Ya te has vuelto a llevar a alguien por delante?
-Eso mismo le he dicho yo- Rosalya también se ríe.- Pero realmente está en nuestra clase.
   Examina a la chica detenidamente. Este gesto incomoda a la joven, pero él no le da importancia. Sonríe burlón y eso a ella no le agrada en absoluto.
-¿Y cómo te llamas, novata?
-Rox Olivier.- Responde insegura.- ¿Y tú…?
-Soy Williams, Max Williams.
   Puede que las apariencias engañen, pero la primera impresión que acaba de tener sobre él no ha sido muy buena.

martes, 17 de marzo de 2015

Introducción.

  Denver, Estados Unidos.
El último año en el instituto Parks Wood comienza para un grupo de amigos. Todo empieza con la bienvenida a nuevos miembros, a nuevas experiencias, nuevas emociones...
Un grupo de música, varias locuras, momentos que no merecen ser recordados... Y diez personas.